Videntes a lo largo del tiempo
En todas las sociedades siempre han existido personas que han tenido dones especiales para poder ver lo que nadie más podía. Estos llamados videntes siempre han vivido al margen de la sociedad.
Uno de los mayores defectos del hombre es que no es capaz de aceptar aquello que no puede entender. Antiguamente, cuando una vidente manifestaba sus poderes era quemaba en la hora por bruja. Hoy en día está algo más aceptado pero todavía hay personas que las cataloga como “locas” o estafadoras afirmando que todo lo que dicen no son más que patrañas o delirios.
El problema es que ha habido “videntes” a lo largo de la historia que se han aprovechado de las personas. Muy probablemente no tenían ningún tipo de don más que el de la palaba; con sus promesa han sido capaces de sacarse mucho dinero. En el momento en el que los seguidores han descubierto su engaño, independientemente de que pudieran o no recuperar lo robado, dejarán de creer en cualquier tipo de conocimiento superior.
Es por ello por lo que hoy en día hay que andar con cuidado antes de elegir a un vidente para realizar cualquier tipo de consulta.
¿Cómo funcionan los dotes de los videntes?
Esto es algo que seguramente nos hemos preguntado alguna vez: ¿Qué ven exactamente los “videntes”? ¿Son visiones? ¿Se guían por las sensaciones? ¿Interpretan la energía?…
En realidad esto dependerá de la magnitud de sus poderes.
Por ejemplo, un vidente de nacimiento es capaz de poder ver como sus sentidos se agudizan para poder captar cosas que nadie más de su entorno puede. Al principio se manifestará como algunas sensaciones que no puede llegar a comprender: es posible que esta sensibilidad le haga sentir el dolor de una desgracia antes de que esta se haya podido producir.
Poco a poco esos dones se irán desarrollando. Si tiene el poder suficiente podrá detectar el estado de ánimo de una persona con tan solo tenerla delante o pensar en ella. Es en este punto cuando ha aprendido a canalizar las diferentes energías que flotan por el mundo y poder ver en ellas lo que decida.
¿Qué papel juegan las cartas en la videncia?
A partir del punto anterior podemos preguntarnos de que les sirven las cartas del tarot si los videntes pueden ver los hechos sin necesidad de haberlas lanzado. Como ya hemos comentado, existe la posibilidad de que un vidente no tenga el poder suficiente como para ver acontecimientos futuros por sí solo.
Esto ocurre normalmente cuando la videncia no es de nacimiento, si no que ha aparecido en un momento de la infancia o un punto del tiempo todavía más alejado.
En este caso tan solo podrá obtener el poder que necesita a través de las cartas.
También es verdad que algunas videntes buenas las utilizan con un objetivo muy especial: poder mostrar a la persona consultante el resultado de la interpretación. Tenemos que reconocer que no parece muy creíble que una persona nos vaya a contar nuestro futuro con tan solo mirarnos a la cara.
Sin embargo, si vamos viendo el resultado de la interpretación y cómo van a apareciendo las cartas, nos será mucho más fácil entenderlo y establecer un patrón.
Podemos entender las cartas como una herramienta que actúa de prolongación de sus poderes. Si echamos un vistazo al pasado, por ejemplo, nos encontramos con los chamanes quieres utilizaban el fuego o sustancias alucinógenas para conseguir ver lo que visualizan las videntes actuales gracias a la baraja de cartas.
A lo largo de todos los años se han utilizado toda una sucesión de herramientas que la vidente consideraba adecuadas para afinar con sus interpretaciones.
Videntes actuales
Hay una cosa que tenemos que tener clara y es que la videncia es muy antigua: desde que se creó la humanidad ha existido una gran fascinación por tener acceso al futuro y todos los acontecimientos que se puedan producir en él. Desde siempre han existido personas que han asegurado recibir mensajes en visiones sobre distintos hechos… y siempre la sociedad ha estado en contra de ellos por no poder entenderles.
Actualmente, en el siglo XXI, hemos experimentado un gran avance gracias a la tecnología. En un principio se podría llegar a pensar que la videncia estaba condenada con tanta evolución, pero los videntes han sido listos y se han adaptado a la nueva situación.
Ahora los podemos encontrar en la televisión, a través de Internet o en nuestros teléfonos móviles. Cualquier persona que necesite un servicio de videncia en una situación específica podrá hacer una breve búsqueda y de inmediato tendrá toda una serie de resultados para que pueda elegir el que le dé más confianza.
Como hemos comentado anteriormente, desde siempre han existido muchas estafas relacionadas en este mundo… y ahora puede que haya incluso más. Lo primero que tenemos que hacer es asegurarnos de que la vidente tiene los dones que dice tener.
Si echamos un vistazo a su página web (en el caso de que tenga), podremos echar un vistazo a toda su trayectoria así como los servicios a los que se dedica de forma habitual. No obstante… esto no nos dice nada porque la ha creado ella y ha elegido exactamente lo que quiere poner.
Una de las mejores maneras de hacerlo es buscar testimonios en Internet. Cuando una persona se siente estafado, normalmente acude a Internet para colgar su opinión y evitar que cualquier otra persona que venga detrás pueda llegar a sufrir la misma suerte.
No obstante también hay que tener en cuenta que cualquier tipo de servicio, ya sea de videntes o de cualquier otra cosa, siempre va a tener opiniones negativas porque no es sencillo contentar a todo el mundo.
La idea es hacer un pequeño balance de opiniones buenas y malas para ver si realmente nos conviene o no.
Así que ya sabes, la videncia está muy presente en la sociedad pero asegúrate que sea un vidente de verdad quien te esté echando las cartas.